Norovirus en aumento: factores detrás de su aparición en el hemisferio norte
La mayoría de los casos son atribuidos a la variante GII.17 del virus, de rápida propagación geográfica

En el último mes, los Centers for Disease Control and Prevention (CDC) de EE. UU. reportaron un aumento inusual de casos de norovirus, con 91 brotes `presuntos o confirmados en la primera semana de diciembre, superando cifras de los últimos años.
Una cepa específica, denominada GII.17, fue identificada como responsable del 70 % de los brotes, superando el número de brotes por la cepa GII.4. También se viene detectando una actividad elevada de norovirus GII.17 en al menos seis países europeos, incluidos Austria, Francia, Alemania, Irlanda, Países Bajos e Inglaterra. El aumento repentino en los brotes por norovirus coincide con un incremento de GII.17 y su rápida propagación geográfica. Algunos de los brotes ocurridos en EE. UU. han sido vinculados a alimentos contaminados como ostras crudas procedentes de Canadá y bayas frescas y congeladas.
El norovirus es un patógeno de clima frío, muy contagioso, que puede permanecer viable en las superficies durante días. Es también medianamente resistente a los desinfectantes y el calor. Se puede transmitir por contacto con una persona infectada que lo elimina a través del vómito o las heces o por la ingestión de agua o alimentos contaminados. Un número bajo de partículas virales puede enfermar a una persona, de ahi su fácil transmisión y capacidad de provocar enfermedad.
Los cruceros, residencias de ancianos, escuelas y guarderías son lugares donde se dan con mayor frecuencia los brotes. Una persona que ha tenido una infección por norovirus puede seguir excretando el virus por semanas aunque ya no tenga síntomas, con capacidad de propagar la enfermedad.
Un investigador de los National Institutes of Health de EE. UU., Albert Kapikian, identificó por primera vez el norovirus en 1972. Lo hizo tras analizar un brote de una enfermedad que ocurrió en invierno y se caracterizó por vómitos, ocurrida en una escuela primaria de Norwalk, Ohio, ciudad que dio origen al nombre “noro”.
Este virus tiene una extraordinaria habilidad para eludir el sistema inmunológico humano. Las personas pueden volverse susceptibles a una nueva infección por la misma cepa en tan solo seis meses.
Algo en este virus en particular engaña al cuerpo para que produzca anticuerpos que en realidad no brindan protección. La explicación estaría en la superficie del norovirus, en su capa externa de proteínas. El tamaño y la organización de la estructura proteica varían enormemente de un norovirus a otro. La cápside viral es muy dinámica, muy móvil y muy flexible, una de las razones por la cual no se ha logrado aún vacunas para prevenir las infecciones.