fbpx

Brasil busca reducir su dependencia de la potasa importada

La potasa es un fertilizante clave para la agricultura y economía de Brasil

Brasil es uno de los mayores exportadores de productos agrícolas. Sin embargo, necesita fertilizantes, y la potasa es un fertilizante clave para sus cultivos. El 95 % del la postasa que usan los productores brasileños se importa. Según el ministerio, Brasil importa alrededor del 85% de todos los fertilizantes utilizados en su producción agrícola nacional.

La minera Brazil Potash, con sede en Toronto, está desarrollando el proyecto de potasa de Autazes en la selva amazónica, que permitirá reducir la dependencia de importaciones. La empresa espera cubrir aproximadamente el 20 % de las necesidades de potasa de Brasil con la producción inicial. Brasil Potash es una empresa privada controlada por inversores brasileños y extranjeros.

Se están llevando a cabo las consultas con los pueblos indígenas, según lo requerido por el convenio con la Organización Internacional del Trabajo. Luego se deberá obtener la licencia de instalación, lo que permitiría a la empresa iniciar la construcción. Brasil Potash también llegó a un acuerdo de compra con AMOJI, uno de los mayores productores de soja del mundo.

Cuando el estudio esté aprobado, se presentará a la Agencia de Protección Medioambiental y se espera que a mediados de 2023, Brasil Potash pueda iniciar la construcción del proyecto en Autazes.

La potasa es un eslabón fundamental en la cadena mundial de abastecimiento de alimentos. Se producen unos 70 millones de toneladas de potasa anualmente. Más del 60 % de la producción proviene de yacimientos situados en Saskatchewan, Canadá, la región rusa de los Urales y el sur de Bielorrusia, y el 70 % se extrae de la minería subterránea convencional.