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Cultivar arroz en el océano: el impacto de lograr tolerancia a la sal

La agricultura oceánica es una forma emergente de producción de alimentos.

El desarrollo de los nuevos cultivares se basa en la amplificación de la expresión de genes que ya se encuentran en el arroz.

Según la FAO (Food Agricultural Organization), el 97.5% del agua en la tierra se encuentra en los océanos y mares de agua salada, únicamente el restante 2.5% es agua dulce. De esa cantidad, el 68,9 % se encuentra en glaciares, el 30,8% en aguas subterráneas y el 0.3% en ríos y lagos. El 90% de los recursos disponibles de agua dulce del planeta están en la Antártida. Cerca del 70% del agua disponible se usa en la agricultura.

El aumento de la demanda de alimentos y la explosión de los niveles de población están empujando a los innovadores a explorar áreas donde la agricultura nunca antes había ido.

Agrisea, una startup de Reino Unido, quiere producir arroz tolerante a la sal y granjas oceánicas flotantes para 2021, con pequeñas granjas piloto para fines de 2020. La iniciativa tendría su base en el comportamiento de los manglares, árboles que crecen hundiendo sus raíces a lo largo de las playas de América Central, para seleccionar plantas resistentes a la salinidad.

El famoso “arroz dorado” o “golden rice”, desarrollado para evitar la ceguera por carencia de vitamina A en poblaciones cuyo principal sustento es el arroz, fue obtenido por modificación de su genoma. A través de la inserción de genes que no se encontraban en el genoma del arroz se logró que produjera beta caroteno, un precursor de la vitamina A en el organismo.

En el caso del arroz tolerante a la sal de Agrisea, se utilizó la edición de genes, amplificando la expresión de genes que ya se encuentran en el arroz y que controlan la tolerancia a la sal. El arroz tolerante a la sal podría cultivarse en agua salada del océano sin el uso de tierra, fertilizantes o agua dulce. En lugar de insertar genes de otras especies, han identificado los genes que controlan la expulsión de sal, el aislamiento celular y la protección del DNA, y están mejorando la expresión de esos genes.

El arroz es uno de los cultivos más intensivos en agua y también uno de los más consumidos en todo el mundo. Cultivado en más de 100 países, el arroz tiene un gran impacto en la alimentación demás de 3.500 millones de personas, principalmente en países asiáticos

Las granjas marinas proyectadas por Agrisea, son estructuras flotantes , diseñadas para instalarse a lo largo de las costas, capaces de albergar cultivos agrícolas. El primer paso en el proceso fue crear una cartera de cultivos resistentes a la sal que eventualmente crecerán en granjas oceánicas flotantes en todo el mundo.

Además de las granjas que proporcionan alimentos en los países productores de arroz, esperan usar las granjas para la biorremediación en zonas costeras.

Agrisea recibió financiación inicial de la aceleradora IndieBio. Al recaudar US$ 1 millón, esperan contratar científicos y expandir su cartera de cultivos tolerantes a la sal para incluir maíz, trigo, cebada y soja, entre otros.